Mi madre me llevó a las rebajas y, después de unas horas siguiéndola, la perdí de vista en la sección Calzados. Pensé en ir al punto de Atención al Cliente, como tantas otras veces, Se ha perdido un niño…, por favor, pasen a recogerlo, pero me contuvo una nueva y liberadora sensación. Que me reclame ella —resonaba en mi cabeza, mientras deambulaba tocándolo todo por Electrónica, Música y Juguetes. A última hora, agotado, me senté en un sofá de la sección de Muebles y con el runrún de fondo de los anuncios de ofertas, me quedé dormido, que me reclame ella…
Aquí sigo. Los dependientes, que son muchos, me alimentan, y por las noches juego a la Play con los guardias jurados. Gano siempre.
(Carmela Greciet – uncuentoaldia.es 30/11/2016)
Aquí sigo. Los dependientes, que son muchos, me alimentan, y por las noches juego a la Play con los guardias jurados. Gano siempre.
(Carmela Greciet – uncuentoaldia.es 30/11/2016)
Mia madre mi portò ai saldi e, dopo averla seguita per alcune ore, la persi di vista nel reparto Calzature. Pensai di andare al Servizio Clienti, come tante altre volte … E’ stato trovato un bambino, si prega di venire a prenderlo … però mi trattenne una nuova sensazione di libertà. Che venga a reclamarmi lei – mi risuonava in testa, mentre me ne andavo in giro toccando tutto nei reparti Elettronica, Musica e Giochi. Alla fine, sfinito, mi sedetti su un divano del reparto Mobili e con il brusìo degli annunci delle promozioni come sottofondo, mi addormentai, che venga a reclamarmi lei ….
Sono ancora qui. I dipendenti, che sono numerosi, mi danno da mangiare e, di notte, gioco alla Playstation con le guardie giurate. Vinco sempre.
Sono ancora qui. I dipendenti, che sono numerosi, mi danno da mangiare e, di notte, gioco alla Playstation con le guardie giurate. Vinco sempre.